Aubrey de Grey (Londres, 20 de abril 1963) es un personaje bastante polémico, aunque algunos lo consideran necesario. Se graduó en ciencias de la computación pero se enamoró de la biología a la par de una genetista de la mosca de la fruta (Drosophila melanogaster) 19 años mayor que él.
Se doctoró en biología en la Universidad de Cambridge (Reino Unido) un año después de publicar “La teoría del envejecimiento de los radicales libres mitocondriales”, donde describió mecanismos moleculares hasta entonces desconocidos por las ciencias de la vida.
Ahora este gerontólogo dirige la fundación Estrategias para la Senescencia Negligible Ingenierizada (SENS, por sus siglas en inglés), que se nutre de la filantropía de mecenas. La mayor donación la hizo él mismo, que destinó gran parte de la herencia de la artista de su madre. “Probablemente iríamos tres veces más rápido si tuviésemos más dinero”, se queja como cualquier investigador.
«Soy un gran fan de Aubrey, me encanta debatir con él. Lo necesitamos. Nos desafía y nos hace ampliar nuestra forma de pensar. No estoy de acuerdo con sus conclusiones, pero en la ciencia eso está bien. Es lo que hace avanzar el campo», dijo de él Stuart J. Olshansky, investigador de la Universidad de Illinois en Chicago (EE. UU.), en una reseña sobre el personaje publicada en el MIT Technology Review.
Esta semana De Grey ha estado en Barcelona, invitado por el Centre de Cultura Contemporània de Barcelona (CCCB) y la Fundació Víctor Grífols, para dar una charla en el marco del ciclo Més o menys humans?.
Nadie quiere envejecer, ¿usted cómo lo lleva?
Bueno, realmente aún no me estoy haciendo viejo [sonríe]. Estoy pasando por un buen momento [mira a su prometida, que le acompaña en las entrevistas]. Pero sí, como todos, no me quiero hacer mayor. Aunque esto no es lo que motiva mi trabajo. Lo que me hace saltar de la cama, aunque estos días me cueste, es el aspecto humanitario de mi investigación. Estoy combatiendo el envejecimiento para salvar unas 100.000 vidas cada día, dos terceras partes de las muertes diarias en todo el mundo. SEGUIR LEYENDO.